Tino Casal/ Alex Piña
Este viernes, en la calle Armando Palacio Valdés, se inaugurará después de tres años la efigie de bronce del 'rey del Glam'
A. ARCE OVIEDO. Miércoles, 10 abril 2019, 01:02
El incombustible Tino Casal habría cumplido 69 años el pasado 11 de febrero de no ser por el desgraciado accidente que acabó con su vida el 22 de septiembre de 1991 en Madrid. Nadie le ha olvidado. Sus familiares, amigos y seguidores lo tienen presente día tras día, pero ahora, a partir del próximo viernes, toda la ciudad podrá visitar al mismísimo 'rey del Glam' a la altura del número 20 de la calle Armando Palacio Valdés. Y es que, tras casi tres años de espera, al fin tendrá lugar la inauguración de la estatua dedicada al famoso músico.
La estatua, elaborada por los hermanos Anselmo y Alfredo Iglesias, de la veterana firma Igless Principado, pesa 400 kilos y está construida en bronce, supera en varios centímetros el 1,82 de altura del difunto Casal (al llevar un sombrero de ala ancha) y ha costado un total de 20.000 euros recolectados gracias a la colaboración ciudadana, la celebración de conciertos conmemorativos, eventos y donaciones. Además, la pieza cuenta con una inscripción del poeta y catedrático de la Universidad de Oviedo, Aurelio González Ovies, que será leída al tiempo durante el acto.
Allí, a las doce del mediodía, el productor cultural Javier Grela será el encargado de glosar la andadura vital y musical del artista antes de proceder a destapar la escultura. Estará acompañado de representantes de la Corporación municipal y de la familia y amigos del autor de 'Eloise'. Posteriormente, actuarán la banda de gaitas Ciudad de Oviedo y la cantante Covadonga de la Rúa.
«Un sacrificio constante»
Víctor González Casal, primo y portavoz de la plataforma que lleva el hombre del cantante, explicó en declaraciones a este diario que «la gente estaba esperando este momento como agua de mayo» y que «Tino, allá donde esté, seguro que se siente orgulloso de todo lo que estamos consiguiendo para él». «Ha sido un trabajo muy duro y un sacrificio constante», relató, «pero al fin ya está hecho y solo queda que todos los ovetenses se paren a contemplar cada día a Tino como lo hacen, por ejemplo, con Woody Allen».
Otro de los invitados de honor a la emotiva inauguración de la efigie era Juan Taboada. Sin embargo, como lamentó González Casal, se encuentra hospitalizado. «Es un motivo de fuerza mayor, pero el destino ha querido que sea así», comentó. «Todos sabemos que Taboada fue no menos que las piernas de Casal, uno de sus impulsores», sentenció.
Fuente: El Comercio Digital