Fotos de A.P.
Luanco es para mí mi segunda casa. A estas alturas, amigos, en que uno añora lo que va perdiendo, sé perfectamente lo que aprecio más, lo que más nos duele, lo que más nos marca. Sé lo que carece de valor alguno y que lo más grande está en lo sencillo, en aquellas cosas de a diario y de siempre, en los nombres propios, que tanto nos dicen, en la voz común de la gente llana, en todos los muchos y buenos momentos. Que solo me importan, como me enseñaron, los seres humanos, humanos por dentro, no vidas privadas. Me encuentro hoy aquí. Mi segundo reino, mi segunda casa...
Aurelio González Ovies